Capítulo 2

1 Dios castigará severamente aquellas personas que hagan cosas que Él ha prohibido. Dios ha hablado con palabras claras que Él está enojado con quienes pecan en contra de Él. Así que cuando Dios juzgue a las personas, Él no excusará a nadie. Ustedes pueden decir que Dios debe castigar a las personas por hacer lo que Él odia. Pero cuando ustedes dicen eso, ustedes verdaderamente dicen que Dios debería castigarlos. Porque cuando ustedes demandan que Dios castigue a otros que hicieron lo que Él odia, ustedes también han vivido el mismo tipo de vida. Ustedes hicieron las mismas cosas que ellos han hecho. 2 Sabemos muy bien que Dios juzgará y castigará justamente personas que hacen tales obras malas. 3 ¡Así que ustedes que dicen que Dios debería castigar a otros por hacer obras malas, a pesar de que ustedes mismos hacen obras malas, ustedes ciertamente deberían no pensar que ustedes mismos podrán escaparse de Dios cuando Él comience a castigarlos a ustedes! 4 Y ustedes no deberían decir: "Dios está actuando muy tolerantemente y pacientemente hacia mi, así que no necesito alejarme de mi pecado". Ustedes deben entender que Dios está esperando pacientemente por que ustedes se arrepientan de sus pecados. 5 Pero en lugar de eso, porque ustedes son testaduros y se rehusan a parar de pecar, Dios los castigará aún más severamente. Él hará eso al tiempo cuando el demuestre que está enojado y juzgue a todas las personas justamente. 6 Dios le pagará de vuelta a todos de acuerdo a lo que ellos merecen por lo que ellos han hecho. 7 Específicamente, algunas personas se mantienen haciendo buenas obras, porque ellos quieren que Dios les dé honor a ellos, y ellos quieren vivir por siemmpre con Él. Dios los recompensará en esta manera. 8 Pero algunas personas actúan de una manera egoísta y se rehusan a creer que lo que Dios dice es cierto, y ellos hacen las cosas que Dios dice que están mal. Dios estará muy enojado y los castigará severeramente. 9 Él causará a todos quienes habitualmente hacen malas obras que sufran mucho y que tengan muchos problemas. Esto ciertamente le pasará a los Judíos que se rehusen a aceptar el mensaje de Dios, porque Dios les dió el privilegio de ser sus personas especiales, pero también le pasará a los no-Judíos. 10 Pero Dios alabará, glorificará, y dará un espíritu pasivo a toda persona que habitualmente hacen buenas obras. Él ciertamente hará esto para los Judíos porque Él los escogió como sus personas especiales, pero Él también lo hará para los no-Judíos. 11 Dios hará esto justamente, porque Él no presta atención a lo importante que es alguien. 12 Aunque los no-Judíos no tienen leyes que Dios le dio a Moisés, todos los no-Judíos que pequen serán apartados de Dios para siempre. Él no considerará si ellos sabían o no sabían las leyes que le dió a Moisés. Y Él también castigará a todos los Judíos que hayan desobedecido sus leyes, porque Él los juzgará de acuerdo a ello. 13 Es correcto para Dios que los castigue a ellos porque no son aquellos simplemente los que conocen las leyes de Dios quienes Él los considera ser justos. En lo contrario, es solamente aquéllos quienes continuamente han obedecido todas las leyes de Dios que Dios las va a considerar justas. 14 Sean los no-Judíos, que no tienen la ley de Dios, libremente obedecen esas leyes, ellos prueban que ellos tienen una ley en sus propias mentes, a pesar de que en realidad no tienen las leyes que Dios dio a Moisés. 15 Ellos muestran que saben en sus propias mentes lo que Dios manda en Su ley, para cada persona en su propia conciencia o bien se acusa de mala conducta o defiende a sí mismo. 16 Dios los castigará a ellos al tiempo cuando Él vaya a juzgar a las personas de acuerdo a lo que ellos han pensado y hecho. Él los juzgará hasta por las cosas que ellos han hecho secretamente. Él va a juzgar las personas autorizando a Jesucristo a juzgarlos a ellos. Esto es lo que yo digo a personas cuando Yo predico las buenas nuevas a ellos. 17 Ahora yo tengo algo que decirle a cualquiera de ustedes Judíos a quienes yo les escribo: Ustedes confían que Dios los salvará porque ustedes conocen las leyes que Él le dió a Moisés, presumen que pertenecen a Dios. 18 Ustedes saben lo que Dios desea. Porque ustedes se les ha enseñado las leyes de Dios, ustedes pueden saber que cosas están correctas y escoger hacerlas. 19 Ustedes están seguros que pueden enseñar la verdad de Dios a los no-Judíos, y que pueden instruir aquellos que no saben nada acerca de Dios. 20 Ustedes están seguros que pueden instruir a aquellos que creen en cosas tontas sobre Dios y aquellos que son como niños porque ellos no saben nada del todo sobre Él. Ustedes están seguros sobre todo esto porque ustedes tienen en la ley lo que les enseña verdaderamente sobre Dios. 21 ¡Desde que ustedes demandan que ustedes tienen todas estas ventajas porque son Judíos, es asqueroso que ustedes enseñen a otros a obedecer las leyes, y que no las obedezcan ustedes mismos! ¡Ustedes que predican que las personas no deben robar cosas es asqueroso que ustedes mismos roben cosas! 22 Ustedes que mandan a personas a que no se duerman con alguien que no está casado, es asqueroso que ustedes cometan adulterio ustedes mismos! Ustedes que mandan a otros a que no adoren ídolos, es asqueroso que ustedes no eviten cosas asquerosas. 23 Ustedes que se jactan diciendo: "Yo tengo las leyes de Dios", ¡es asqueroso que ustedes desobedecen esas mismas leyes! ¡Como resultado essán insultando a Dios! 24 Ustedes no deben ser como nuestros ancestros, de los cuales se han escrito éstas palabras en las escrituras: "Los no-Judíos hablan mal sobre Dios por las malas acciones de ustedes Judíos". Los no Judíos dicen Dios debe ser un hipócrita si él tolera el comportamiento de personas como ustedes. 25 Cualquiera de ustedes quien es circuncidado para mostrar que él pertenece a Dios puede beneficiarse de eso si él obedece la ley que él dio a Moisés. Pero si tú, una persona circuncidada, desobedece la ley, Dios lo considerará a usted que no es mejor a la vista de Dios que no es mejor que otra persona no está circuncidado. 26 Esto significa que Dios ciertamente considera que hasta los no-Judíos quienes no son circucidados pueden convertirse en sus personas si ellos obedecen las cosas que Él mandó en sus leyes. 27 Éstas personas, que no son circuncidadas pero que todavía obedecen las leyes de Dios, van a declarar que Dios es justo cuando el los castiga, para el que está circuncidado pero aún viola la ley. 28 No son los que realizan rituales para Dios que son verdaderos Judíos, y es no ser circunciso en sus cuerpos que causa a Dios para aceptarlos a ellos. 29 En lo contrario, nosotros quienes Dios ha cambiado en el interior son los verdaderos Judíos. Dios nos ha aceptado porque nosotros hemos permitido que el Espíritu de Dios cambie nuestra naturaleza, no porque nosotros realizamos rituales que manda la ley. Hasta si otras personas no van a alabarnos, Dios nos alabará.